Desde muy tempranito había movimiento en el
CEI: los preparativos de la jornada y recepción de las visitas estaban en
marcha. El Taller de Panadería encendía el horno, dándole calor a la fresca
mañana de aquel día, que anunciaba una jornada plena de trabajo.
A las 10 de la mañana abrimos el Centro
Educativo Integral para recibir a muchos amigos que se acercaban a vivir y
compartir nuestras actividades.
Cada espacio del gran salón del CEI fue
ocupado con una actividad diferente. Olores, colores y sonidos se mezclaban en
un cálido ambiente fraterno.
Shampúes, peinados y perfumes por aquí,
horneado de panes y bizcochos por allá.
Manitas que pintaban mandalas y al mundo
animal en forma de caretas; manos adolescentes que trazaban estilos libres de
formas y movimientos del cuerpo. Hilos y lanas que formaban entramados gorros o
pequeñas artesanías. Mamás y abuelas que cosían y sonreían: entre guantes y
manoplas, anécdotas y experiencias. Entretanto, los tableros de ajedrez,
ordenadamente dispuestos, definían los límites de 'otro mundo' donde reinaban
la concentración y el silencio.
Y a los sonidos de las bienvenidas, las
palabras de afecto, las risas de los niños nacidas desde el gusto por el juego,
se sumaban las entonaciones del coro y los ensayos y acordes de pianos y
guitarras.
Colaboradores en el rol de actores de teatro
ultimando detalles y ajustes antes de salir a escena para contarnos con una bella
y sencilla historia que cuando oramos, le escribimos una carta a Dios.
Todo el salón acompañó en pensamiento, la
dulce voz de una amiguita que hizo la oración de apertura. Le dedicamos un
aplauso inmenso a otra amiguita que nos endulzó con la preparación de
panqueques y nos deleitamos con la representación de los chicos de Coro y
Orquesta.
Luego de la rica comida y los postres,
limpiamos todo el salón y la vajilla y nos dispusimos a compartir emociones y
reflexiones.
Frases nacidas de la emoción, síntesis y
sentidos análisis fueron compartidos en una 'rueda de amigos', donde juntos
intentamos definir todo lo (inolvidable) vivido.
Cerramos la jornada como la iniciamos, con
abrazos y cálidas palabras, ahora de despedida...
Gracias a todos, chicos, mamás, abuelas,
visitas! En nombre de todos, gracias!
Más fotos en nuestra página de Facebook: www.facebook.com/caminoalacasita
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